jueves, 23 de mayo de 2019

Alcachofas a la plancha con aove y flor de sal

Para nosotros en casa, una de las formas más deliciosas de comer alcachofas, es también una de las más sencillas de preparar.



Y es que la alcachofa suele intimidar mucho a la gente, con su textura y forma extrañas, aunque considerándolo bien, es una verdura de lo más particular.

Estas son de nuestra huerta, no han salido muy grandes porque son las primeras, pero el sabor el magnífico.

Vale, pues lo primero que hay que hacer es quitar las hojas exteriores pelando hacia abajo, como si fuese un plátano, una vez que nos demos cuenta que estamos llegando al corazón, dejamos de quitar hojas y con un cuchillo cortamos la punta de arriba que suele ser dura. Las abrimos a la mitad, y con una cucharita retiramos los "pelillos" que tienen justo en el centro, una vez hecho esto ya todo es comestible. Luego las lavamos muy bien y las sumergimos en agua con un chorrito de limón, para que no se oxiden tan rápido. 

Yo las dejo reposar en el agua con limón solo el tiempo necesario mientras limpio el resto de alcachofas, luego las escurro y en una sartén anti adherente, pongo un chorrito de AOVE (aceite de oliva virgen extra), las pongo una al lado de la otra, a fuego medio bajo y con la tapa puesta, no pongo nada de sal en este momento, ellas se cocinan en su jugo. 



Luego que estén doradas por los dos lados y tiernas (unos 10 min) servimos inmediatamente con un chorrito de AOVE extra y un poco de sal maldón o sal en hojuelas. 
De verdad es una maravilla de guarnición.


Por si nunca habéis visto una planta de alcachofas.

Y si la alcachofa no se cosecha, se abre y se convierte en esta hermosa flor.
Gracias por leerme y hasta la próxima.

Rumiana

No hay comentarios:

Publicar un comentario