martes, 18 de julio de 2023

Moussaka - Un pastel de berenjena y carne griego, para chuparse los dedos.

Si alguna vez habéis estado en Grecia, es casi imposible que no hayáis probado este delicioso y único plato.

Consiste en capas de carne picada guisada y berenjena, siendo la primera capa (base) de patata.



La berenjena puede ser frita o simplemente hecha a la plancha con muy poco aceite (es como yo la hago), es cuestión de gustos, al fin y al cabo.

Algo interesante e inusual que tiene la moussaka, es que la carne tiene un punto de canela en cu preparación, digo que es inusual, porque generalmente solemos ponerle canela a los platos dulces, pero os prometo que va de maravilla con la carne, eso sí, se pone muy poca. 

Os dejo la receta, y ya sabéis que siempre contesto a las preguntas. 

Hacedla en casa, que seguro os queda de lujo

Ingredientes:

- 3 berenjenas medianas

 2 patatas

- Sal

- AOVE


Relleno:

AOVE

1 cebolla cortada en brunoise

400 gr de carne de ternera picada

½ taza de vino blanco

4 cucharadas de tomate frito

½ taza de agua

1 rama de perejil

Sal y pimienta 

Pizca de canela en polvo


Aparte:

2 tazas de salsa bechamel

150 gr de queso para gratinar





Preparación:

Cortamos las berenjenas en rebanadas a lo largo y ponemos bastante sal. 

Dejamos unos minutos. Lavamos,  secamos y ponemos en las sartén  caliente hasta cocinar por ambos lados.

Cortamos las patatas en rodajas de ½ cm, las ponemos en una sartén con agua y AOVE.

Cocinamos hasta que estén casi hechas.


Pochamos la cebolla con AOVE y sal, agregamos la carne y cocinamos hasta que se seque.

Deglasamos con el vino y de nuevo cocinamos hasta que seque, añadimos el resto de ingredientes y cocinamos unos 20 minutos. Dejamos enfriar un poco.

Preparamos la bechamel mientras se enfría la carne.

Montamos la moussaka alternando capas de berenjena y carne. Terminamos con  salsa bechamel y queso parmesano u otro queso madurado.

Horneamos hasta dorar. Dejamos reposar antes de comer.



Salsa Bechamel:


Ingredientes:

50 gr de mantequilla 

50 g de  harina de trigo

600 ml de eche entera

Sal al gusto

Nuez moscada molida un pellizquito


Preparación:

Para hacer salsa bechamel, comenzamos poniendo una sartén al fuego y añadiendo 50 g

de mantequilla. En cuanto se funde, agregamos la misma cantidad de harina y removemos

formando un roux o una pasta. Si vamos a querer una bechamel más fina o más espesa, 

podemos alterar un poco esta proporción, aunque yo suelo mantenerla siempre, y con lo 

que juego es con la cantidad de leche y con el tiempo de cocción / evaporación.


Una vez bien mezclada la harina y la mantequilla, vamos agregando la leche sin dejar de

remover. Es el momento de cambiar la cuchara de palo por las varillas y así evitaremos 

que se nos formen grumos. Clave: ir añadiendo la leche poco a poco, para que no haya 

cambios de temperatura.


Puedes conseguir mejores resultados si tienes la leche muy caliente en un cazo y vas 

agregando cacito a cacito, sin añadir más leche hasta que la anterior ha sido absorbida 

por la masa. Y eso sí, siempre removiendo sin parar, haciendo movimientos circulares 

o dibujando ochos en la sartén, para que la salsa bechamel siempre esté en movimiento.

Cuando hayas agregado toda la leche, es el momento de probar y añadir sal y el clásico 

toque de nuez moscada, tan característico de la bechamel. Si quieres una bechamel más 

espesa, dedica más tiempo y deja que el líquido se vaya evaporando poco a poco 

mientras la sartén se llena de burbujas.



Gracias por leerme

Rumiana